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Rabash / Lo que nos falta principalmente

Baruj Shalom Ha-Levi Ashlag (Rabash)

24. Lo que nos falta principalmente

Lo que nos falta principalmente, por lo cual no tenemos suficiente combustible para trabajar, es la falta de importancia de la meta, que significa que no sabemos cómo valorar nuestro servicio, que sepamos a quién otorgamos. Y también nos falta el conocimiento de la grandeza del Creador, que sepamos cuán felices somos por tener el privilegio de servir al Rey, pues no tenemos nada para que podamos comprender Su grandeza.

Esto se llama en el lenguaje del sagrado Zóhar: Shejiná en el polvo, esto es que el asunto de otorgar al Creador nos importa tanto como el polvo y de por sí no tenemos el combustible para el trabajo, porque sin placer no hay fuerza para trabajar, sino que en el lugar donde nos ilumina el amor propio allí el cuerpo recibe vitalidad, pero en el trabajo de otorgamiento, el cuerpo no siente placer en ello y de por sí debe estar «postrado bajo su peso».

Sin embargo, cuando siente que está sirviendo a un rey importante, según la importancia del rey obtendrá satisfacción y placer de servirle. Por eso es que entonces ya tiene combustible que le de fuerza cada vez para que pueda avanzar, pues siente que está sirviendo a un rey importante.

Y entonces, cuando tiene comprensión y sensación de saber a quién está otorgando, en la medida de fuerza que tenía para trabajar sobre la intención del amor propio, ahora tiene fuerza de trabajar con el fin de otorgar, porque quien otorga a un hombre importante, se considera como si recibiera de este, y siendo que para la recepción, el cuerpo tiene fuerza de trabajar para conseguir recompensa, y también al otorgar a un rey importante recibe un gran placer.

Así entendemos lo que está escrito en la introducción a TES sobre «ella dio», y si es un hombre importante, es santificada, por el placer que ella recibe de él. Y aquí vemos una cosa nueva, que otorgar a un hombre importante se considera para uno es como verdadera recepción, según la norma, que el artículo sobre Kidushín (casamiento) habla acerca de la recepción con el fin de otorgar, en este caso la recepción se llama otorgamiento. Aquí se puede entender el otro lado de la moneda, es decir, que el otorgamiento se llama recepción. Y por esta razón ya tiene combustible, ya que cuando otorga a un hombre importante es como si recibiera de él, por eso tiene fuerza para trabajar.

De ello se desprende que lo único que nos falta es creer en la grandeza del Creador, para que tengamos la fuerza de trabajar en otorgamiento.