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Rabash / Santificación del mes

Santificación del mes

Artículo 21

“Este mes os será principio de los meses” (Éxodo 12).

Explicó Rashi: “Moisés cuestionó sobre la luna nueva, cómo se vería y cómo sería digna de santificar. Y el Creador señaló con Su dedo y le mostró la luna en el firmamento, y le dijo: ´así la verás y la santificarás”.

Los intérpretes preguntaron: ¿Qué pareció difícil a Moisés respecto a la santificación de la luna? Y aún más, ¿Cuál es el asunto de “señaló con Su dedo”?, ¿qué implica la palabra “dedo”?

Mi padre y maestro (Baal HaSulam) dijo que el asunto de la luna se refiera a Maljut, que trata de la aceptación de la carga del reino de los cielos. Para Moisés fue difícil decir al pueblo de Israel que acepten recibir la carga del reino de los cielos, mientras sienten el estado de ocultamiento. Y la razón demanda que si llegara al pueblo de Israel diciéndoles que acepten el estado del reino de los cielos con alguna revelación divina, entonces habría lugar para hablar con ellos.

Pero se refiere a que hay que santificar la luna cuando no está llena, sino en estado de luna nueva, cuando aún no se nota que recibe la luz del sol y aun no ilumina, y es precisamente ese el momento en el que se debe santificarla.

La interpretación es que uno debe aceptar la carga del reino de los cielos en su estado más bajo y decir de ella que incluso en este estado, que no puede haber estado inferior a él, o sea, en el estado en que está completamente por encima de la razón y no tiene ningún soporte, ni intelectual ni sentimental sobre el cual pueda construir sus fundamentos.

Y entonces se encuentra como si estuviera suspendido entre cielo y tierra y no tiene ningún soporte, que se encuentra completamente por encima de la razón. Entonces es que uno dice que el Creador le envió este estado en el que se encuentra en absoluta bajeza, puesto a que el Creador desea que uno acepte la carga del reino de los cielos en este estado de bajeza. Y entonces uno acepta este estado, puesto a que cree, por encima de la razón, que el estado en el cual se halla ahora le ha sido enviado por el Creador, es decir que el Creador desea que uno vea el estado más bajo en el que es posible hallarse en el mundo.

Por esta razón uno debe decir que cree en el Creador en todas las formas, lo cual se llama rendición incondicional. Esto significa que uno no dice al Creador: si Tú me brindas una buena sensación, en la que yo sienta que “La tierra está llena de Su bondad”, estoy dispuesto a creer.

Sin embargo, cuando no tiene conocimiento y ninguna sensación de espiritualidad, uno no puede recibir la carga del reino de los cielos y de la Torá y las Mitzvot (preceptos), sino que como se ha dicho, tiene que aceptar el reino de los cielos sin condiciones.

Y esto fue difícil para Moisés, llegar al pueblo de Israel con este grado de bajeza. Y por esto el Creador le señaló con el dedo y l e dijo: ´así la verás y la santificarás´, o sea el estado de luna nueva, en la que no se nota aún su grandeza.

Y es precisamente cuando se acepta el reino de los cielos en estado de bajeza, que se revelará luego en base a lo dicho por los sabios antiguos, a saber: Dijo Rabí Elazar – el Creador formará un círculo para los justos, y se sentará entre ellos en el jardín de Edén, y cada uno de ellos indicará con su dedo lo que se ha dicho: “Y se dirá en aquel día: He aquí, este es nuestro Dios. Le hemos esperado y nos salvará. Este es el Creador a quien hemos esperado, nos regocijaremos y nos alegraremos en Su salvación” - fin del comentario” (Taanit 31)

Resulta que el asunto de que el Creador mostró con el dedo la luna y le dijo: “Así”, de esta forma nos merecemos que cada uno muestre con su dedo “He aquí, este es nuestro Creador