Lección Reunión Local #34 - Continuación del Curso de Decenas y el artículo "La Libertad"

Reunión Local #34 - Continuación del Curso de Decenas y el artículo "La Libertad"

Esta semana, continuamos el estudio de textos cabalísticos auténticos en un grupo grande, particularmente es la séptima semana sobre "La Libertad" del Rabino Yehuda Leib Ha-Levi Ashlag (Baal HaSulam). Además de revisar y trabajar los temas discutidos en el "Curso de Decenas".

Contenido de la lección
Materiales
En la primera parte de la reunión local, volveremos nuevamente a un punto clave del artículo: 

La Libertad del Individuo

 Junto con nuevos añadidos en clips de video de las lecciones del Rav Dr. Michael Laitman.

En la segunda parte, trabajaremos sobre un tema central en el "Curso de decenas" del miércoles:

Los Principios de Conexión en la decena

Reunión Local

"La Libertad"


Esta semana continuamos tanto con el "Curso de decena" como con la lectura de las aclaraciones de Baal HaSulam sobre la libertad de elección en el artículo "La Libertad".

Como hemos mencionado antes, Baal HaSulam escribió extensamente con el fin de ayudar a los estudiantes a alcanzar el propósito de la creación: alcanzar la equivalencia de forma con las cualidades del Creador (amor y otorgamiento). Esta semana nos enfocamos en La Libertad del Individuo.

En la reunión local, leeremos algunos extractos del artículo y luego trataremos de entender qué está ocurriendo en el texto, seguido de otra lectura y discusiones sobre los temas juntos.

También tenemos clips adicionales del Rav Dr. Michael Laitman como importantes aclaraciones del artículo.

Además, haremos uno o dos talleres sobre el tema del "Curso de Decenas".


"La Libertad"

Rav Yehuda Ashlag, Baal HaSulam

La libertad del individuo

Y ahora llegamos también a una comprensión profunda y exacta de la libertad del individuo. Sin embargo, esto tiene que ver solamente con el primer factor, «la base», que es la sustancia primigenia en cada hombre, es decir, todas las tendencias que heredamos de nuestros padres y antepasados, y que hacen que una persona difiera de otra.

Al fin y al cabo, verás que, aunque miles de personas compartan el mismo entorno, por el hecho de que los otros tres factores también actúan todos sobre ellas de forma equivalente, no podrás encontrar entre ellos a dos personas que compartan el mismo atributo. Esto se debe a que cada una de ellas tiene su propia base especial, solo de acuerdo a sí mismo. Y es como la base del trigo que, aunque cambie mucho debido a los tres últimos factores, aun así, conservará la forma originaria del trigo y nunca adoptará la forma de otra especie.


La forma general de los progenitores no se pierde

También es cierto que cada «base» que se haya desprendido de la forma ancestral de los progenitores y haya adoptado una forma nueva como consecuencia de los tres factores que le fueron agregados –y estos la cambian considerablemente– con todo esto, no perderá la forma general de los progenitores y nunca adoptará la forma de otra persona que se parezca a él, del mismo modo que la avena nunca se parecerá al trigo. Después de todo, cada base tiene su propia cadena larga de generaciones, conteniendo varias centenas de generaciones, y esta base incluye los conceptos de todas ellas. Pero en él no aparecen en la misma forma que aparecieron en sus antepasados, es decir, en forma de ideas, sino que solo existen como formas abstractas. Por lo tanto, están presentes en él solamente en forma de fuerzas simples denominadas «tendencias naturales» o «instintos», sin que él conozca su causa para entender por qué él actúa del modo en que actúa. Por consiguiente, nunca puede haber dos personas en el mundo con la misma cualidad.


La obligación de conservar la libertad del individuo

Debes saber que este es el verdadero patrimonio del individuo, el cual está prohibido dañar ni cambiar. Porque el fin de todas estas tendencias contenidas en la base es impresionarse y tomar la forma de conceptos para cuando ese individuo crezca y madure, como fue explicado con anterioridad. Y por la fuerza de la ley del desarrollo, que controla toda esa cadena y siempre la empuja hacia adelante, tal como se explica en el artículo «La paz». Asimismo, vemos que finalmente, cada una de las tendencias se convertirá en conceptos muy sublimes, de una importancia inconmensurable.

Resulta que todo aquel que destruya cualquier tendencia del individuo y la erradique de él, provoca la desaparición de esa encumbrada y maravillosa idea del mundo, que en el futuro debería surgir al final de la cadena. Porque esa tendencia nunca volverá a repetirse en ningún otro cuerpo que no sea ese.

Y aquí deberíamos entender que, cuando cierta tendencia particular cambia tomando la forma de un concepto, este ya no puede ser distinguido como bueno o malo. Porque tales distinciones solo existen cuando todavía son tendencias o conceptos que no maduraron, y de ninguna manera serán reconocibles cuando han tomado la forma de conceptos verdaderos. Y esto se aclarará en su totalidad en los próximos artículos y con todas las explicaciones y justificaciones.

De lo anterior, podemos comprender la gran destrucción que llevan a cabo aquellas naciones que establecen su dominio sobre las minorías quitándoles su libertad y no permitiéndoles continuar viviendo según sus tendencias, las cuales heredaron de sus antepasados. Porque son consideradas asesinas de almas. Incluso aquellos que no creen en la religión y en la providencia con propósito, podrán entender el deber de preservar la libertad del individuo, al observar los sistemas de la naturaleza.

Pues nuestros ojos ven como todos los pueblos que fueron cayendo y se destruyeron de generación en generación, fue solo debido a la opresión que impusieron a las minorías e individuos, quienes, en consecuencia, se rebelaron contra ellos y los destruyeron. Por lo tanto, queda claro que no se puede establecer la paz en el mundo si no tenemos en cuenta la libertad del individuo. Sin ella, no habrá paz y la destrucción prevalecerá.

Así, hemos definido claramente, con absoluta precisión, la esencia del individuo, después de quitarle todo lo que le llegó de la sociedad. Pero ahora la pregunta es: Finalmente, ¿dónde está el individuo mismo? Porque todo lo que hemos dicho hasta ahora sobre el individuo se entiende solo como su patrimonio, es decir, la herencia legada de sus antepasados. Pero, ¿dónde está el individuo mismo? Es decir, ¿dónde está el heredero y portador de ese patrimonio que nos exige que protejamos su propiedad? De hecho, de todo lo que ha sido explicado hasta ahora, todavía no hemos encontrado el punto del «yo» en el hombre, que se encuentre frente a nosotros como una unidad independiente. Asimismo, ¿qué me aporta el primer factor, que es una cadena larga de miles de personas que se suceden de generación en generación, por medio de lo cual definimos la imagen del individuo como heredero? Y ¿para qué necesito los otros tres factores, es decir, miles de personas que se encuentran juntas en una misma generación? Finalmente, cada persona es considerada solo como la figura de una máquina pública que siempre está lista para ser utilizada por el público, según la voluntad de este. Es decir, que se convierte en un subordinado a dos tipos de público. Desde la perspectiva del primer factor, se convierte en subordinado a un gran público de generaciones pasadas, que se encontraban una tras otra. Y desde la perspectiva de los otros tres factores, se convierte en subordinado al público de los que se encuentran con él en la misma generación.

Esto es, por cierto, una cuestión universal. Por eso, hay muchos que se oponen al método natural anterior, aunque conocen bien su validez. No obstante, en su lugar, eligen métodos metafísicos, o el dualismo o el trascendentalismo. Imaginándose cierta entidad espiritual que se asienta en la interioridad del cuerpo como alma del hombre. Esta alma lo hace inteligente y activa el cuerpo etc., es la esencia del hombre y su «yo».

Quizás todas esas explicaciones puedan apaciguar la mente, pero el problema está en que no tienen ninguna solución científica, en cuanto a, cómo es posible que una entidad espiritual pueda tener cualquier tipo de contacto con átomos materiales del cuerpo, de modo que pueda causarle un movimiento. Y toda su sabiduría y profundización no les ayudó a encontrar aquí un puente suficiente, con el que atravesar ese amplio y profundo abismo que se encuentra entre la entidad espiritual y el átomo corporal. Y, por lo tanto, la ciencia no ha ganado nada con todos estos métodos metafísicos.


Discusión Abierta

"¿Por qué necesito los otros tres factores, que son las miles de personas que se encuentran lado a lado en la misma generación?"

¿Cuál es tu impresión del énfasis de Baal HaSulam en la unicidad individual?

¿Cómo entendiste "cada tendencia está destinada a convertirse en un concepto sublime e inmensurablemente importante"?

Después de leer lo anterior, ¿cómo has entendido "la necesidad de preservar la libertad del individuo"?


Clips


Los Principios de Conexión en la Decena


Preguntas del Taller

1) Compartamos nuestra apreciación por encontrar una sociedad que quiera alcanzar el sublime objetivo de otorgamiento sobre el Creador.

2) ¿Cómo te han acercado tus observaciones a lo largo del curso a los principios que se están enseñando y al objetivo?

3) ¿Cuál es tu impresión del marco de trabajo como una ayuda importante en el desarrollo espiritual?


Nos Vemos la Próxima Semana